¿Sabías que existía una biblioteca de estilistas? Esa es la Albright Fashion Library. Si te gusta la moda, no debes dudar en conocer un poco más al respecto de esta maravilla fashionista.
¿Qué puedes encontrar en esta biblioteca?
La biblioteca no tiene ningún distintivo externo, ni hace publicidad. Está ubicada en el primer piso del número 62 de Cooper Square(Nueva York), y tan solo basta con llamar a su gran puerta blanca para acceder.
Apenas entras, a la derecha está la mesa de trabajo de las asistentes de Patricia Black, la conocida como “estilista de los estilistas”: una persona muy influyente en el mundo de la moda que sabe todo sobre quién es quién en este universo.
Tras atravesar el hall central, verás un almacén de 2200 metros cuadrados con cientos de estanterías que cuentan con piezas curiosas: los icónicos vestidos florales de Ghesquière para Balenciaga, la chaqueta de Balmain que lució la supermodelo Gisele Bundchen en un editorial de Vogue américa o el vestido de borlas y flecos de Dolce & Gabanna que usó Lindsay Lohan en una de sus primeras películas. Hay un total de 20 mil piezas, 2500 de las cuales son vestidos de firmas reconocidas —Jimmy Choo, Christian Louboutin, Manolo Blahnik o Prada—.
La idea es que este lugar sirva como una forma de que todas las mujeres puedan vivir su alfombra roja: la idea es conseguir el modelo perfecto para una ocasión especial.
La historia de la librería
Todas las piezas de la librería pertenecen a Irene Albright, una de las estilistas más importantes e influyentes de 1970. Ella, al terminar un shooting, solía comprar toda la ropa usada, a la que consideraba una inversión. Años después abrió la tienda Imelda’s closet, a la que los estilistas neoyorquinos iban para alquilar prendas para las producciones. Patricia contactó con Irene en la década de 1990, y tiempo después crearon en conjunto la Albright Fashion Library. Fue la misma Irene la que le pidió a Patricia que se pusiera al frente.
¿Cómo alquilar un look?
Hay que llamar al almacén con al menos una semana de antelación, y hacer un depósito previo de 200 dólares, que se descontarán del monto total. El alquiler de la prenda se suele hacer por una semana, y el precio mínimo de un look son unos 800 dólares. Quedarás vestida de pie a cabeza, y tendrás consejos respecto al peinado y maquillaje. Si bien se alquilan joyas, para Black es más importante llevar algo que tenga un valor sentimental propio.
Lo que lo cotiza y le permitirá en un futuro no muy lejano abrir más tiendas, es que no solo alquila ropa, sino que crea un look completo. Si bien es la tienda de alquiler de ropa más cara, su precio lo vale justamente por esto: la sensación de sentirse única.
¿Te gustaría visitar a Albright Fashion Library? ¿Por qué?