Chanel es sinónimo de clase y buen gusto. Por eso, cada uno de sus nuevos proyectos están llenos de originalidad, al tiempo que manifiestan un estilo clásico y que perdura siempre, la seña de identidad de la marca.
Hoy te contamos un poco más sobre Mademoiselle Privé, la nueva exposición que abrió en la galería Saatchi de Londres.
¿Qué tiene de especial la exposición de Chanel? La tecnología
Mademoiselle Privé es una forma de expresar al completo la creatividad que acompaña a Chanel a lo largo de los años. Con esta exposición multisensorial abierta en la Galería Saatchi de Londres se busca ofrecer no solo los productos sino la creatividad única.
La galería, que abrió en el mes de octubre, se puede disfrutar muchísimo más si, antes de visitarla, se descarga la app de Mademoiselle Privé -Chanel es uno de los fieles convencidos de que lo digital les permitirá mantenerse en contacto con el público-. El objetivo de la exposición es ver mucho más de los tres íconos de la marca: la alta costura, la alta joyería y el Chanel número 5.
Con el e-commerce programado para el próximo año y la app completamente renovada para ofrecer una mirada más cercana a sus colecciones -comenzando con la primavera verano 2016-, ya que se considera que la pasarela es el gran espectáculo, y la app la forma de mostrar lo que se vio de una forma más calmada. Sin duda alguna, todo desde una invitación y sin resultar agresivos.
La última exposición itinerante de Chanel en Londres recibió 160.000 personas, y teniendo en cuenta que solo 60 personas podrán entrar al mismo tiempo, es importante observar la disponibilidad en la app para no sufrir el congestionamiento.
Y además…
El vínculo entre lo clásico y lo moderno comienza con un clásico jardín inglés que puedes disfrutar a la entrada de la galería. Aquí, la tecnología explica el sueño de Gabrielle Chanel que inspira a los hermanos hortícolas Harry y David Rich, para pasar a ver los puntos clásicos de la casa Chanel, como la escalera Art Decó. Si tienes un iPhone podrás ver el apartamento en la Rue Chambon.
Si sigues caminando, encontrarás una impresión ilustrativa de la primera boutique de sombreros de Chanel y dibujos personales de sus viajes a Escocia, Inglaterra y Venecia que “cobran vida”.
Por otro lado, tenemos el laboratorio olfativo, una gran gramática de las fragancias de la firma. Y nada de esto estaría completo si no se expusiera también la primera y única edición de alta joyería de Chanel, con bijoux de diamantes de 1932, tiaras Star Diamond, broches con plumas y más, ya que hay 37 de las 42 piezas originales; y también la ropa, mostrada como una perfecta obra de arte, ya que en la maison trabajan más de mil artesanos.
En la galería de bisutería, que no tiene las piezas especialmente protegidas más que por un par de guardias de seguridad, podemos ver en las paredes fotografías de Karl Lagerfeld o de Keira Knightley con algunas de las piezas clásicas, como el anillo de cóctel.
En otro rincón, una graciosa película muestra a Lagerfeld con Chanel -en una clara ficción-, luchando contra los códigos de la casa; ya que ambos se caracterizaron por ser muy trabajadores, pero con visiones diametralmente opuestas, porque los tiempos son muy diferentes.
También podemos ver 12 looks llamativos de la casa, sacados especialmente del recientemente creado archivo -al que irán a parar 10 outfits de cad temporada-. La zona tiene un aire decorativos del siglo XVIII, que da paso al Métiers d’Art, un espacio de reflexión con un taller de la elaboración propia y un seminario de fragancias.
¿Te gustaría visitar la exposición Mademoiselle Privé de Chanel?