El rubor es el encargado de resaltar nuestros rasgos, especialmente los pómulos, como signo de belleza. Por eso, es importante que sepamos cómo utilizar el rubor correctamente, ya que con ciertos conocimientos podemos hacer verdaderas maravillas.
#1 Conoce tu contorno
Por ejemplo, las caras redondas deben empezar a usar el rubor en la parte superior de la oreja, y mezclarlo bien para que el resultado quede increíble. Este método alarga el rostro redondo.
Por su parte, si tu cara es larga debes centrar el color en las manzanas de las mejillas, y acabar el barrido en la altura de las orejas. Esto creará un efecto de mayor anchura. En cambio, el rostro cuadrado necesita suavizar las faccione mediante una línea diagonal desde la parte superior de la oreja.
Finalmente, los rostros en forma de corazón deben usar rubores suaves y poco definidos, especialmente en las manzanas de las mejillas.
#2 Tener un acabado natural
Es importante probar diferentes looks con rubores, pero que siempre el resultado sea natural. Una buena forma es usando un rubor en crema, en lugar de uno en polvo. Este se aplica con los dedos.
Escoge un color que complemente tu piel, aplica primero en las manzanas de las mejillas y mezcla hacia arriba, pero no lo lleves hacia la zona de la nariz.
#3 Rubor para el día y para la noche
Durante el día, es importante usar el rubor de forma muy ligera, en tonos sutiles y mu bien difuminado. Intenta usar menor cantidad durante el verano, ya que dará un aspecto muy plástico.
Por la noche, podrás elegir entre tonos más profundos y dramáticos, con el fin de crear un estilo muy seductor. Busca tintes líquidos con mucho brillo para crear unas mejillas sanas y brillantes.
#4 Evita las manchas
Siempre que aplicamos el rubor, comenzamos desde un punto, y la piel debe estar preparada antes de aplicarlo. Elige una base o una BB Cream, porque si aplicas el rubor directamente, los aceites de tu piel harán ver ese punto e partida como una mancha, y no quedará bien.
#5 Ir de a poco
Para no pasarnos de la mano con el rubor, lo mejor que podemos hacer es comenzar poco a poco. Coloca un poco de rubor en la brocha, y ve difuminando bien sobre tus mejillas.
Si recién estás empezando, no elijas pigmentos, y ve practicando con rubores de tonos puros.
Estos 5 trucos de maquillaje para aplicar rubor cambiarán la forma de tu rostro. ¡Anímate!