El kale tiene los días contados como superalimento de moda. El nuevo superalimento es la moringa, conocida también como árbol de baqueta debido a la forma de sus vainas, es una planta subtropical que contiene gran cantidad de nutrientes beneficiosos para tu salud. ¿Quieres saber cuáles son?
Nutrientes de la moringa
La moringa tiene:
- 4 veces más vitamina A que la zanahoria
- 7 veces más vitamina C que las naranjas
- 4 veces más calcio que la leche
- 4 veces más potasio que las bananas
- 2 veces más proteínas que el yogur
Por todos estos nutrientes, los beneficios para la salud de la moringa son increíbles: incrementa las defensas del cuerpo, controla los niveles de colesterol, promueve el funcionamiento del hígado y los riñones, da más energía, brinda una correcta digestión, es antioxidante, antiinflamatorio, mejora la circulación de la sangre y restablece los niveles de azúcar en sangre.
Además, tiene beneficios para la belleza, ya que tiene propiedades anti envejecimiento, mejora el aspecto de la piel y reduce las líneas de expresión.
Ten en cuenta que la moringa puede producir algunos efectos secundarios como náuseas, acidez, pérdida de sueño, y un ligero efecto laxante.
Cómo consumir la moringa
Las hojas de moringa pueden comerse crudas, cocidas, en polvo o seca; las vainas son comunes en lo platos asiáticos, y se puede comer de la misma forma, e incluso exprimidos para hacer aceite.
Si vas a consumir el polvo, debes comenzar con media cucharadita los primeros días, ya que puede ser demasiado fuerte. Es ideal comenzar en el desayuno y siempre acompañado de alimentos. Después puedes comenzar con una cucharadita, que es más que suficiente para una persona saludable que solo quiere una leve mejoría. Si tienes algún dolor o te estás recuperando de una enfermedad, puedes consumir hasta dos cucharaditas; y si eres saludable pero practicas mucho ejercicio físico diario, puedes consumir tres cucharaditas. A las dos semanas puedes notar que quieres consumir más, pero escucha a tu cuerpo y regula las cantidades.
No siempre -aunque es recomendable que sí- tiene que consumirse junto al desayuno. Si eres de esas personas que se ven tentadas a consumir alimentos dulces o grasos después del mediodía, puede que te convenga consumirla con el almuerzo; y si quieres mejorar tu digestión o dormir mejor, puedes tomarla en la noche.
Para disimular el sabor, puedes combinarla con cereales o avena, miel, licuados, smoothies, ensaladas y jugos, productos horneados -se agrega a la harina-. Además, puedes preparar té de moringa, aunque ten cuidado de hervir primero el agua y luego añadir las hojas o el polvo, para que no pierdan sus propiedades.
¿Conocías los beneficios de la moringa, el nuevo superalimento? ¿Te animarás a incluirlo en tu dieta?